Michael Chia nació en Singapur y trasladó su residencia a Bélgica a finales de los 80. Actualmente reside en la ciudad de Bruselas.
De pequeño quería ser astronauta. Su aventura en la fotografía comenzó a los once años, cuando de manera permanente cogía prestada la cámara de su madre, una simple Kodak instamatic, con la cual se entretenía por las noches apuntando al espacio para fotografiar las estrellas.
Con el tiempo comprendió que la cámara no captura lo que el ojo ve. Descubrió que con ella podía congelar un momento en el espacio, en el tiempo. Y así dió sus primeros pasos hasta llegar a comprender que la imaginación podía ser capturada con el arte de la fotografía.
Michael Chia creció en medio de duras realidades. Su sueño de poder vestir un traje espacial se fue desvaneciendo, pero su pasión por la fotografía permaneció. Mientras subía la escalerilla de la compañía aérea, sintió que aquello no era lo suyo. La fotografía le atrapó de nuevo. Dió el paso decisivo. Abandonó su carrera y desde entonces vive la vida que ha elegido como fotógrafo free lance.
Si su fotografía necesita una categoría, en términos generales podría ser la de fotografía de viajes y el uso de técnicas sencillas. No hace la típica fotografía de “imágenes bonitas y relucientes” de destinos exóticos. Su interés se centra en aspectos sociales del lugar que visita. Mezcla fotografía documental con la abstracción para crear una imagen. Se planteo capturar todas sus emociones e imaginaciones, volcándolas sobre una pieza bidimensional de papel capaz de hablar sin palabras. A pesar de que actualmente trabaja en digital, su medio favorito continua siendo la cámara manual tradicional, cargada con un rollo de película de blanco y negro. Entre exposición y exposición organiza talleres de fotografía en Bruselas y realiza los encargos que le llegan. Continua viajando por muchos paises en busca de lugares e imágenes que piden a gritos ser fotografiadas. Sus otros intereses incluyen la música, escribir, ir de copas, bucear con escafandra autónoma, el karate, y soñar despierto.
p.s. A pesar de que es chino, en contra de lo que se suele pensar de los inmigrantes de este pais, no es dueño ni trabaja en un Resturante Chino :-) Sin embargo es un buen cocinero!
Klauss van Damme 2007
Comisario artístico independiente
klauss.salalaiart@gmail.com